Fondo documental de Ania. Ermita de San Martín

Reja de San Millán

La Reja de San Millán es un documento escrito hacia el año 1025 procedente del cartulario del monasterio de San Millán de la Cogolla. Tiene un gran valor por la información toponímica que aporta de Álava.

tapa 401 402 403 404 contratapa 00 176-7 178-9

Archivo Real Chancillería de Valladolid

Años 1549 – 1550

Hay un pleito sobre el siguiente asunto

“La posesión y disfrute de la iglesia parroquial de San Martín en el despoblado de Ania. Gonzalo Bonzalez de Junguitu, clérigo, contra el canónigo Andrés de Villafranca, vecino de Vitoria”

Libros de Actas

Hay 3 libros de actas de Ania

1.- Cuentas de Fábrica: años 1577 – 1790 (Libro 342-1) Abarca 214 años

2.- Cuentas de Fábrica: años 1791 – 1985 (Libro 342-2) Abarca 195 años

3.- Cuentas de Fábrica: años 1985 y siguientes (el actual) Abarca 26 años

Los libros núm. 1 y 2 están depositados en el Archivo Diocesano de Vitoria

El libro núm. 3 está en poder del actual mayordomo

Por tanto, hay una documentación escrita continuada de 435 años (desde 1577)

Ventana saetera románica del ábside y logos de Ania

Plano Enclave de Ania

Ania es un enclave del Ayuntamiento de Arrazua-Ubarrundia situado entre los Ayuntamientos de Vitoria-Gasteiz (Lubiano, Junguitu y Matauco) y Elburgo

Informaciones sobre Ania - Euskomedia

Euskomedia

Ania

Despoblado situado al E., y a unos 225 m. del lugar de Junguitu, hermandad de Vitoria, Álava. Hay en él una ermita titulada San Martín de Anza, con su término redondo amojonado, cuyo diezmo pertenecía a un beneficio simple, y la primicia, alternativamente a las iglesias de Junguitu, Matauco, Arbulo y Lubiano, a cuyo cargo estaba el aseo e iluminación de dicha- ermita.

En lo antiguo fue parroquia del pueblo llamado Ania, perteneciente a la merindad de Harhazua, del cual se hace mención en el catálogo de los pueblos de esta provincia que se formó en el s. XI, existente en el archivo de San Millán.

El terreno de este despoblado correspondía al duque del Infantado, el cual por esta razón percibía la alcabala cuando se vendía alguna heredad de este territorio.

Ref. Martínez Marina.

Arte

Mortuorio alavés, comunal a Jungitu, Matauko, Arbulo y Lubiano. Documentado el año 1025 dentro del distrito de Harhazua y tributando, junto a Junguitu, tres rejas al monasterio de S. Millán de La Cogolla. También aparece como Ania en la carta del obispo Aznar (1257), contribuyendo con 250 maravedíes al cerco de Tarifa.

Despoblado ya en la segunda mitad del siglo XVI. Durante el Antiguo Régimen preliberal el señorío sobre Ania correspondía a los herederos de los Mendoza, en los últimos siglos concretamente a los Duques del Infantado.

Ermita de San Martín. Portada de arco de medio punto y de piedra de sillería. Imposta sin decorar. Fábrica medieval de planta rectangular. En la cabecera, pequeña ventana semejante a una saetera. Canes biselados sin decorar.

Retablo dorado y pintado del siglo XVIII. Cuerpo con nicho y remate. Imagen de la Virgen del Rosario, barroca, de fines del siglo XVIII, frecuentemente en los pueblos congozantes del despoblado. Talla de S. Martín, del siglo XVIII, sin especial interés.

El Diccionario de la Real Academia de la Historia de 1802 menciona a la ermita como S. Martín de Anza, muy probablemente un error.

Alberto GARATE GOÑI

Una vieja imagen de la ermita de Ania antes de restaurarla

Vista de la ermita de Ania en la actualidad (restaurada)

Hace unos años se restauró la ermita de San Martín de Ania. Se sustituyo la cubierta del tejado y se restauró el interior y el exterior.

Además se han hecho nuevas plantaciones de árboles y se ha cuidado la campa y todo su entorno.Éste es el resultado

Interior de la ermita de Ania

Retablo: San Martín (arriba) y la Virgen

Imagen de la Virgen

Expolios en Ania

En 1977 se produjo en primero de los robos perpetrados en Ania. También robaron en otras iglesias y ermitas de la zona como Gauna y el cementerio de Matauco.

Los bienes robados fueron:

1. Las imágenes de Ntra. Sra. del Rosario, la de San Martín y otra menor. Fueron localizadas un tiempo después en Bilbao cuando estaban a punto de ser embarcadas para su envío al extranjero. Se recuperaron, pero con varios deterioros en la imagen de la Virgen y el Niño.

2. Una centenaria lámpara de aceite que colgaba del techo (hecha de metal forjado), con sus contrapesos para subirla y bajarla.

3. Unos candelabros y otros objetos menores.

Años después robaron una campana situada en el interior del pórtico (a la izquierda según se entra). Se solía voltear tirando de una cadena. La campana es lo último que se robó. ¿En 1992?

Una familia generosa encargó a un restaurador-tallista los delicados y costosos trabajos de reparación de la imagen de la Virgen, haciéndose cargo de los gastos. Hubo que rehacer una mano y la corona de la Virgen y un bracito del Niño. (*)

La lámpara, los candelabros y la campana no han sido localizados ni repuestos.

Vestigios de los robos:

 Se conservan en el techo de la ermita los anclajes de la lámpara de aceite.

 Se conserva en el pórtico la losa con el agujero donde encajaba el poste que sostenía la campana

(*) Familia generosa: María Esperanza y Ricardo Sáez de Castillo Múgica (Junguitu).

Restaurador-tallista: Exuperio Vaca Hernández “Pello”

Contraste imágenes Virgen de Ania

Antes del robo y Después del robo

En 1977 (acta de 15.09.1984) se produjo el robo de las imágenes de la ermita que sufrieron, según el acta, estos desperfectos: falta de una mano y de la corona de la Virgen y de un bracito del Niño

La restauración se hizo por encargo de una familia de Junguitu: María Esperanza y Ricardo Sáez de Castillo Múgica que se hizo cargo de los gastos.

El restaurador fue Exuperio Vaca Hernandez “Peio”

El fondo de fotos de López de Guereñu abarca el periodo de 1930 a 1960

una vez restaurada

Cofradía de Nuestra Señora de Ania

Funcionamiento

El 7 de septiembre de 1985 se abre en Matauco el 3º libro de la Ermita de San Martín de Ania (los 2 anteriores están depositados en el Archivo Diocesano) El 1º libro de 1577 – 1790 y el 2º de 1791 - 1985.

De la lectura de sus actas se deduce que el funcionamiento de la Cofradía de Ntra. Sra. de Ania es el que se describe seguidamente.

A lo largo de los años ha habido algunos cambios. Se refleja en cada capítulo, cuándo se produjo el cambio y en qué consistió. (*)

1. Cofrades

La Cofradía de Nuestra Señora de Ania está formada por los vecinos de los cuatro pueblos que rodean y cuidan de la ermita de San Martín de Ania: Lubiano, Junguitu, Matuco y Arbulo.

2. La ermita

La ermita de San Martín de Ania es el único edificio que se conserva del antiguo poblado de Ania.

El santo titular de la ermita es San Martín de Tours que se encuentra en la parte superior del retablo.

El centro del retablo lo ocupa una imagen del siglo XVIII de Ntra. Sra. del Rosario, conocida como Ntra. Sra. de Ania.

3. Festividad e Imagen

La fiesta de Ntra. Sra. de Ania es el día 15 de Septiembre, festividad de Ntra. Sra. de los Dolores. Este es el día oficial de la celebración y así se ha venido celebrando tradicionalmente.

En 1984 (según un acta de dicho año), siendo administrador Matauco, se hizo una propuesta de trasladar la fecha de la fiesta, por razones de calendario escolar, del 15 al 8 de septiembre, pero esta propuesta no prosperó.

En ese año de 1984 el día 15 fue sábado, por lo que el cambio no hubiese tenido ningún efecto; tampoco en el siguiente al caer en domingo.

Sin embargo algo después, (probablemente en 1989, siendo el 15 de septiembre viernes), se decidió cambiar la fecha adelantándola o retrasándola a un sábado

(*) En las cuentas del año 1989 se empieza a poner en las actas "Lunes de difuntos" en vez de "2º día de la fiesta"

Antes el día 16, “2º día de la fiesta”, y ahora el lunes siguiente a la fiesta de Ania, “lunes de difuntos” se celebra la Misa por los cofrades fallecidos en el último año.

Hay gente mayor que cree recordar que antes la advocación de la Virgen de Ania era la de Ntra. Sra. de los Remedios.

La fecha de la festividad de Ntra. Sra. de los Remedios varía según donde se consulte:

11 de septiembre, según algunos santorales

10 de octubre, en algunos calendarios

La imagen actual es la de Ntra. Sra. del Rosario.

4. Robos en la ermita

En 1977 (acta de 15.09.1984) se produjo el robo de las imágenes de la ermita. También robaron los candelabros y la lámpara de aceite que colgaba del techo.

Las imágenes fueron recuperadas, con varios desperfectos.

Una familia generosa de Junguitu, María Esperanza y Ricardo Sáez de Castillo Múgica, encargaron a un tallista, Exuperio Vaca Hernandez “Peio” la restauración de las imágenes, haciéndose cargo de los gastos.

Hubo que rehacer una mano y la corona de la Virgen y un bracito del Niño.

Años más tarde robaron la campana del pórtico.

La lámpara, los candelabros y la campana no han sido localizados ni repuestos.

5. Administración de la ermita.

Cada año se ocupa del cuidado de la ermita uno de los 4 pueblos por el orden siguiente:

Lubiano, Junguitu, Matauco y Arbulo.

Los administradores son:

El Abad, que es el párroco del pueblo correspondiente

El Mayordomo, que es un vecino de tal pueblo

6. Traspaso de la Administración

En septiembre, unos días antes de la fiesta, se reúnen en el pueblo entrante, el Abad y el Mayordomo salientes con el Abad y el Mayordomo del pueblo entrante.

Se rinden cuentas redactándose un acta de la reunión.

(*) A partir de 2003, siendo el mayordomo del pueblo de Lubiano, sólo firma la conformidad de las cuentas el mayordomo saliente, sin darles forma de acta.

7. Fondos de la Cofradía

La Cofradía se nutre de:

 Lo recaudado en la cuestación que realizan los mayordomos por las casas de los pueblos, días antes de la fiesta.

 Lo recaudado en el día de la Misa por los cofrades fallecidos

 Lo recaudado en el cepillo de la ermita

 Otros donativos particulares

(*) En 1999 se dejó de recaudar donativos por las casas de los pueblos, siendo mayordomo el pueblo de Lubiano. La última recaudación la realizó Arbulo en 1998.

(*) En 2006 se dejó de pedir en la misa por los cofrades difuntos, siendo mayordomo el pueblo de Arbulo. La última colecta la realizó Matauco en 2005

8. Destino de los fondos

 Mantenimiento de la ermita.

 Pago a un predicador en el día de la fiesta.

(*) En 2001 se hizo por última vez un pago por la misa y sermón del día de la fiesta, siendo mayordomo del pueblo de Arbulo.

9. Cultos

Misa por la mañana en el día de la fiesta.

Rosario por la tarde de dicho día.

Misa al día siguiente de la fiesta o al lunes siguiente, por todos los cofrades fallecidos durante el año.

Misa por cada cofrade fallecido, en los días siguientes a su fallecimiento.

(*) La última misa por un cofrade fallecido se ofició en 1996; fue por un vecino de Junguitu, siendo el mayordomo del pueblo de Matauco.

El traspaso del cargo de mayordomo y la aprobación de las cuentas han sido simplificados en exceso, siendo en 2010 una escueta redacción de cuentas firmada sólo por el mayordomo saliente.

Otras actividades

A. Marcha ciclista

En 1994, a iniciativa del pueblo de Junguitu, se efectuó la primera marcha ciclista recorriendo los 4 pueblos en el orden siguiente:

Junguitu, Lubiano, Matauco y Arbulo

Transcurre por caminos agrícolas.

Es para participantes de todas las edades y no competitiva.

Tiene lugar el día de la fiesta, por la mañana, después de la misa en la ermita.

B. Almuerzo el día de la fiesta

En 1998, siendo mayordomo el pueblo de Arbulo, por acuerdo de los 4 pueblos, tuvo lugar por primera vez un almuerzo en la campa de la ermita, después de la misa.

Los costos son a cuenta de los 4 pueblos a partes iguales.

Enclave de Ania

Es un mortuorio o pueblo desaparecido, que se ha mantenido desde el medievo en la jurisdicción de Arrazua, hasta la actualidad que pertenece al Ayuntamiento de Arrazua-Ubarrundia; pero, separado del mismo, como una isla entre las jurisdicciones de Vitoria (límites con Junguitu, Lubiano, Matauco ) y Elburgo (Arbulo).

Lo que hoy nos queda es la ermita del poblado de Ania (perteneciente en la Alta Edad Media, a la Hermandad de "Harhazua") de la cual ya se hace mención en la lista de los pueblos de la provincia que tributaban al Monasterio de San Millán de la Cogolla en 1025, y que se conoce como la Reja de San Millán, se cita a la entonces Iglesia de Ania juntamente con Junguitu, que pagaban 3 rejas, lo que quiere decir: que se pagan una reja por cada diez casas, siendo la reja el equivalente a un lingote de hierro desbastado en la forja.

Otra fecha de referencia que sobre Ania tenemos en el medievo, es con motivo de la pujanza económica y social de la villa de Vitoria, amparada por los reyes, y que en ese tanteo se impondrá en la política, economía y hasta en la participacón de los diezmos eclesiásticos que sobre las aldeas circundante imponia, y estas se repliegan a la defensiva. Así aparece Ania entre los sesenta pueblos de aldeas de la Llanada , en la carta de la concordia del obispo D. Jerónimo Aznar y el cabildo calagurritano-calceatense en 1227, dentro del arcedianato de Álava y arciprestazgo de Vitoria, (es de los que reconoce al obispo).

En el siglo XIII y primer tercio del siglo XIV entran en la Historia, los principales linajes de la Llanada, participando en la Reconquista. Entre ellos, Los Mendoza, Los Guevara, Los Coladros... así mismo hay pueblos que aportan sus "donadíos" al rey para las campañas contra los moriscos. Por esta razón, para la Toma de Tarifa en 1295, Ania dona 250 maravedís, como así aparece en las cuentas de D. Juán Ferrador, "cobrador o alfardero" natural de pueblo de Los Huetos.

Por los vestigios hallados en los alrededores de la ermita de Ania podemos deducir que la Edad Media no fue su primer poblamiento, los restos de cerámica romana nos hace suponer (porque no ha habido un estudio arqueológico) que hubo un habitat romano, al que puede deberse el nombre de Ania, de origen impreciso, que entre otros intelectuales, Caro Baroja relaciona con una base antroponímica, que aporta el nombre personal ANNIUS, por otra parte, M.L. Albertos también ve una relación con el antropónimo Ania.

A partir del siglo XIV el nombre de Ania desaparece de los documentos, como consecuencia del despoblamiento que debió producirse sobre esta fechas, y que sucedió con varias aldeas de la periferia de Vitoria, provocada por la importante vitalidad y autoridad que esta ciudad estaba consiguiendo, acrecentada por Alfonso VIII y Alfonso X, y que venia afirmándose como cabeza de las aldeas circundantes.

Otro documento de importancia inconmensurable para nuestra provincia es el "Libro de visitas del Licenciado Martín Gil", elaborado en el 1551. En este libro Ania no aparece documentada, aunque indudablemente existe la iglesia, es de suponer que D. Martín Gil no la catalogó, ni la mencionó por ser en este momento un lugar arruinado.

Además de la existencia probada documental y físicamente de Ania, son importantes a destacar la reflexiones que hizo Iñaki de Birgala en la Revista Gastéis en 1983: "Al haberse efectuado la concentración parcelaria y variado la estructura de sus fincas y vías de comunicación han desaparecido los antiguos caminos que daban fé de la existencia de una población. Una norma que se cumple en casi todas las localidades es la de disponer de un camino que las comunique con pueblos cercanos. Así ocurrió con Ania, según podemos comprobar en la fotografía aérea del Servicio de Catastro de 1932 y que aquí reproducimos. En ella se observa la existencia de caminos que, de forma radical, partiendo de la ermita (donde presumiblemente se encontraba la población) se dirigían a todas las localidades de su entorno".

Otro dato que nos aporta: "La toponimia del término de Ania sólo cita escuetamente a Ania; sin embargo en los pueblos colindantes, encontramos dos topónimos que nos indican algo más: Aniartea (hasta Ania), situado en Junguitu, y Aniaburu (comienzo de Ania), localizado en Matauco. Lo que ambos topónimos significan está de acuerdo con su emplazamiento".

Además de estos dos topónimos aparecen otros relacionados con el lugar y que se encuentran en los pueblos colindantes como: Aniabide (labrantío de lubiano), Aniabidea (mojonera de Lubiano), Aniguti (labrantío de Junguitu), Aniaostea (labrantío de Junguitu).

En la Edad Media las personas, especialmente las nobles, eran conocidas en base a tres elementos nominales: el nombre de pila, el patronímico y el toponímico. El patronímico es la derivación del nombre de pila del padre, el toponímico corresponde, por su parte, al solar, casa o torre donde se consideraba estaba el tronco del linaje. Como todos los pueblos alaveses, su topónomo, sirvió para apellido de sus habitantes y así se encuentra en documento de 1576, entre otros un cantero llamado Juan González de Ania.

Después de dos siglos sin tener referencia sobre este lugar, vulve a aparecer en un documento fechado en 1516-1517 con motivo del amojonamiento de las tierras del Duque del Infantando, como así se desprende del documento: "los lugares de Çurbano e Arçubiaga qe.son del duque del ynfantado e confinan lugar de gamarra e los lugares de Vetoñu e arcaute e arcaya e ylarraça junguitu qe.son de la dha Ciudad ela iglesia qe.dizen de anya qe.es del dho duque qe.confina conlos dhos lugares de junguitu e ylarraça e co los lugares de matauqu e lubiano..."

A finales del siglo XVI, volvemos a tener referencias del lugar, como así nos lo hace saber D. Ángel Ibisate: "Ania reaparece documentada como un despoblado y reducida a ermita su iglesia parroquial; ermita con personalidad propia y sus propios libros de fábrica, el primero de los cuales abierto en 1594 (cuyas cubiertas son un viejo pergamino, parte de un libro litúrgico, con curiosas notaciones musicales) se encabeza así: "libro de cuentas de la Iglesia des despoblado de Sant Martín de Ania de los provechos que la dicha Iglesia tiene del año 1577 y desde adelante".

En documentos de la comunidad de Ania, se refleja la importancia que ya tenía en tiempos antiguos, datando, por ejemplo, el 10 de Abril de 1719 en el pórtico de la ermita de S. Martín de Ania, un acuerdo entre cuatro pueblos (Arbulo, Matauco, Luniano, Junguitu) "para conferir y deliberar cosas del servicio de Dios y utilidad y gobierno de dicho término".

En la actualidad el término de Ania es de una cinco hectáreas labrantías, es una llanura bien delimitada por 10 mojones que marcan su jurisdicción. En cuanto a la ermita, es un edificio reformado, pero que mantiene algunos restos románicos, testigos de la época en que fue construida. Pero el tema que más nos inquieta de este lugar, es ¿porqué a pertenecido ya desde tiempos pasados a la Hermandad de Arrazua, siendo una isla dentro de la jurisdicción de Elburgo y Vitoria-Gasteiz? ¿qué hechos han sucedido a lo largo de la Historia para que permaneciera en esta Hermandad?. Hasta hoy, no se ha podido encontrar ningún documento o dato que nos ayude a despejar esta incógnita.

Lo único que suponemos es que hubo intereses muy fuertes en el seno de los Linajes más poderos de la Provincia, y Ania se hallaba en la jurisdicción de una de las Hermandades, en la de Azua que pertenecía a las llamadas "Tierras del Duque".

Al constituirse los ayuntamientos, la Hermandad de Azua pasa a ser el Ayuntamiento de Azua, y el territorio de Ania se sigue perteneciendo a este Ayuntamiento. Aunque podemos constatar documentalmente en dos escritos dirigidos por parte del entonces Alcalde de Elburgo, D.Nemesio Zárate, a la Diputación Foral de Álava, en un intento expansionista, de incluir Ania al Ayuntamiento de Elburgo, hubo una negativa por parte de la Entidad Foral, los escritos de 1886 dicen:

"Que habiéndose declarado por la Excma. Diputación repetida, por decreto de treinta y uno de marzo de mil ochocientos ochenta y seis, como lérmino jurisdiccional de Arrazua el término mortuorio de San Martín de Ania, varios vecinos del pueblo de Arbulo se han dirigido a mi autoridad implorándome se les elimine de la estadística varias fincas que tienen hecha la declaración en este Ayuntamiento y que por orden del Alcalde de Arrazua , han tenido que hacer la declaración ante aquel Ayuntamiento, a fin de que satisfagan la contribución que corresponda".

En Mayo de 1887 el Alcalde de Elburgo vuelve a enviar otro escrito a la Diputación Foral de Álava que dice:

El Alcalde del Ayuntamiento de Elburgo acude a V.E., manifestando que varios vecinos del pueblo de Arbulo que tienen fincas en el término de San Martín de Ania las han registrado en dicho Ayuntamiento y que habiéndose declarado por acuerdo de V.E. fecha 20 de Mayo de 1886, que dicho término mortuorio pertenece a la jurisdicción de Arrazua, este Ayuntamiento ha obligado a dichos vecinos de Arbulo a contribuir en el por la riqueza imponible que dichas heredades representan, solicitando a mérito de lo expuesto la rebaja correspondiente a Elburgo y el aumento a Arrazua.

A día de hoy, la ermita no está asociada a una sola parroquia como es lo habitual, sino que lo está a cuatro parroquias: las de los cuatro pueblos confinantes Arbulo (Ayuntamiento de Elburgo), Junguitu, Matauco y Lubiano (Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz), pero siendo jurisdicción del Ayuntamiento de Arrazua-Ubarrundia.

Aunque dedicada a San Martín, en los últimos tiempos es más conocida como la Virgen de Ania, en cuyo honor se celebran cultos en la mitad de Septiembre. Estos cuatro pueblos , cada año uno, organizan la fiesta, con una romería y una Misa Mayor en honor a ésta cada día mas venerada Virgen de Ania, e incluso han compuesto un pequeño himno de letra de D. Venancio del Val sobre música de D. Luis Aramburu, que dice:

A la Virgen de Ania cantamos

Sus devotos con gran emoción

Hermanados Junguitu y Matauco

Con Arbulo y Lubiano a una voz/

Danos, Virgen bendita, tu gozo

Danos tu fe, danos siempre tu amor,

A los hijos que tanto te quieren

No les prives de tu protección.

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